ESPARTA

Esparta o lacedemonia fue la capital de Laconia ubicada en la península del Peloponeso a orillas del rio Eurotas,  era una de las polis más importantes junto a Atenas y Tebas en la antigua Grecia. Esparta surgió como una entidad política en siglo X a. C., cuando los invasores dorios subyugaron a la población local. Hacia el 650 a. C. la ciudad ya era una potencia militar en el conjunto de la Antigua Grecia.
Los espartanos representan tanto la supremacía militar como la organización eficiente, eran totalmente implacables y virtuosos.  Primeramente cabe hacer una distinción entre Esparta y Atenas: “mientras que los atenienses fomentaron la democracia, el individualismo y la alta cultura, su gran rival, Esparta, encarnó el militarismo, el centralismo autoritario, la segregación y una brutal represión” (Cartledge, 2002).

ORGANIZACIÓN SOCIAL

DERECHO ESPARTANO

La población espartana se divide en tres grupos: espartiatas (considerados ciudadanos), periecos e ilotas (no eran considerados ciudadanos). Los dos primeros eran lacedemonios; los terceros mesenios.

ESPARTIATAS:

Los espartiatas son ciudadanos de pleno derecho, es la clase dirigente y la que se impone sobre los demás grupos sociales, tenían lotes de tierras conocidas como Kleros  y un grupo de ilotas (quienes no tenían ningún derecho político ni civil y solo eran servidumbre). Este grupo se dedica también a la vida militar, debe estar totalmente subordinado al Estado quien controla su educación desde los siete años. La familia solo tiene un papel institucional y la mujer goza de un grado muy alto de independencia a deferencia de las demás griegas.     
Algo muy particular en los espartanos era la syssitia que era de obligatorio cumplimiento y se hacía entre los 20 – 30 años, es una participación en una comida en común en el cuartel que mantendrán los miembros varones en una unidad militar a la cual pertenecen, se tenía que comer y dormir en el cuartel, y costear la syssitia. Se adquiría la independencia a partir de los 30 años y quien no podía pagar la syssitia acababa perdiendo los derechos políticos, a esto se le llamaba “Atimía: Privación total o parcial de los derechos cívicos. Los espartanos afectados por esta medida no podían sentarse a la mesa común, formar parte del Consejo y otras medidas que los convertía en ciudadanos de segunda clase”. (Moreno, 2007).
Hay que tener algo en claro, las tierras que manejaban los espartanos eran de carácter público, los espartanos no eran propietarios sino usufructuarios de la tierra. El aspecto más clave de esto es que los espartanos no podían vender, donar o heredar la tierra, era el Estado quien podía asignarlo a otra persona. El Estado va concediendo tierras a todo espartiata, según su necesidad. A pesar de que todos contaban con un lote de tierras no se dio una igualdad patrimonial ya que había unas tierras que eran  las de los periecos las cuales si se podían vender. Cada ciudadano administraba sus tierras, cobraba sus rentas y parte de ellas las invertía para pagar las syssitia.

PERIECOS:

Los periecos son hombres libres los cuales carecían absolutamente de derechos políticos pero si tenían algunos derechos civiles, también se les daba tierras pero eran las peores del valle. Viven en aldeas en los alrededores de las polis, se dedicaron a las artesanías, la agricultura y el comercio. A veces, ser perieco es más ventajoso que ser guerrero. Las comunidades gozan de autonomía administrativa y Esparta no interviene ni en lo jurídico ni en lo social en su organización interna.
Los periecos no debían pagar tributos ni servirle al ejército, su estatus era cómodo y no les importaba no tener derechos políticos en Esparta, ya que no tenían la rigurosidad de las leyes Espartanas ni la educación militar estricta. En el siglo IV a.C. hubo unas reformas destinadas a incluir a los periecos como ciudadanos de plenos derechos políticos, pero ellos no parecieron interesados.

ILOTAS:  

La comunidad ilota tiene una gran diferencia ya que no gozaban de privilegios económicos, políticos,  jurídicos y tenía una gran diferencia étnica ya que eran los conquistados de los espartanos. Los ilotas sometidos a un sistema de servidumbre comunitaria trabajando para el Estado espartano. Superaban ampliamente en número a los espartanos, debía trabajar la tierra del espartiata al que fue asignado y del que se le daba la mitad de la producción o lo acordado según el caso o dependía de la cosecha. Viven en aldeas y tienen familia, lo más peculiar es que no eran esclavos porque no podían ser vendidos, además de su dependencia con el Estado, se puede decir que eran una servidumbre de carácter público. Solo el estado tiene el poder para dar a libertad a los ilotas, un ejemplo de ello es la batalla de platea donde cada espartano llevo a seis ilotas y se le dio la libertad a serie de ellos

ORGANIZACIÓN ESTATAL DE ESPARTA:

La ciudad- Estado de Esparta se caracterizó por ser agrícola, comunal y militarista sin gran desarrollo comercial y con visos socialistas. Su organización socio- política data alrededor del 700 a. C, se tiene conocimientos de que los espartanos tenían regulada la vida social y política por una especie de constitución (la gran Rhetra), que se le atribuye a un personaje  ilustrado y culto llamado Licurgo y a quien una leyenda atribuye el hecho de haber consultado sus leyes con el oráculo de Delfos.


ESTA CONSTITUCIÓN, ORGANIZADORA DEL ESTADO ESPARTANO SE AJUSTA A CUATRO ELEMENTOS CARACTERÍSTICOS:

1.     Una Monarquía dual, es decir, el gobierno de dos reyes hereditarios que representaban a dos casas nobles, generalmente rivales, y que funcionaban como altas autoridades religiosas y militares, con carácter de jefes supremos del ejército y de la nación. “Cada rey de Esparta escogía dos representantes suyos ante el oráculo de Delfos. En tiempos de guerra sólo uno de los reyes iba con el Ejército, mientras el otro permanecía gobernando en la ciudad” (Velasco, 2012)
2.     Un Consejo, llamado Gerusia, integrado por 28 ancianos escogidos por elección entre las familias más nobles (los dos monarcas eran también, por derecho propio, miembros de la Gerusia), que tenían como principal función preparar todos los asuntos que se fueran a poner en conocimiento de la Asamblea, así como constituirse en Tribunal o Corte Superior Marcial cuando se encontraba en juego la vida de un espartano.
3.     Una asamblea popular electiva, llamada Apella, constituida por espartanos mayores de treinta años, que se reunía una vez al mes bajo el mando de los Éforos para aprobar o no algún proyecto que se le sometiera a consulta (no tenía atribuciones para iniciar asuntos nacidos en su seno, ni para discutirlos) en quienes, teóricamente residía la voluntad del pueblo.
4.     Cinco magistrados, llamados Éforos, verdaderos gobernantes, en quienes residía el mando del Estado espartano. Estos tenían facultades de control, con autoridad indiscutible, de la moral de todos los ciudadanos, estaban encargados de las relaciones internacionales y diplomáticas de Esparta (recibían directamente a las embajadas extranjeras) y, en casos específicos de orden civil, podían funcionar como jueces o constituirse en tribunales de justicia. “El Eforado era la institución más poderosa de Esparta. Dirigía la eugenesia, la crianza, la instrucción, el Ejército, la política exterior, etcétera, y tenían además poder para vetar cualquier decisión que saliera del Senado o de la Asamblea. Hacían de jueces supremos y presidían las reuniones y asambleas diplomáticas”. (Velasco, 2012).

Toda esta organización institucional se dio a entender que “el poder espartano no era una fría máquina burocrática que desconocía las pasiones y los impulsos. Era un ser espiritual que había echado raíces en el alma de cada espartano, que estaba vivo y que tenía una voluntad propia. Los líderes espartanos medían su calidad en cuanto a que eran capaces de ser dignos receptáculos y transmisores de tal voluntad” (Velasco, 2012)
Otro aspecto muy interesante era que “en Esparta las votaciones se hacían por aclamación: el candidato que recibía las ovaciones más avasalladoras y los aplausos más tumultuosos era el que triunfaba. Este método, contrariamente a lo que pueda parecer, es mucho más inteligente que el demócrata actual, ya que ascendía al poder un candidato que contaba siempre con la lealtad de la ciudadanía”. (Velasco, 2012)
Cabe resaltar en los espartanos la nomocracia: los reyes, a las órdenes de las leyes. Todas estas instituciones y métodos formaban un régimen ciertamente único.  Platón, hablando sobre el poder espartano, dijo: “No sé qué nombre darle. El Eforado es tiránico, pero Esparta parece a veces la cosa más cercana a una democracia pura. Sería absurdo negar que es una aristocracia, e incluye una monarquía, la más antigua del mundo” (Leyes", IV, 712).

Ahora bien, las leyes de Licurgo, no solo trataron temas referentes a la administración y gobierno de los espartanos y de su polis, sino que también regulaban la vida social de los individuos como ya se ha dicho anteriormente como lo es de repartir las tierras entre los espartanos en forma igualitaria pero condicionados a que no podía ser vendida.

Por otra parte también eran regulados asuntos tales como la conducta y vestimenta de los hombres, este debía portar túnicas rojas y cabello largo. Todo espartano vivía para la guerra, para dar la vida por el estado y vivir en igualdad con sus semejantes, por esto al nacer un anciano verificaba si el niño era sano y si no tenía ninguna malformación ya que de ser así se le consideraba un eslabón débil, los niños que no pasaban el riguroso control eran arrojados a un acantilado.

Las madres eran las encargadas de educación de los niños y jóvenes y enfocada a crear hombres viriles y aptos para la guerra, todo niño debe ser formado para la elite espartana y eran educados para no sentir dolor ni lloriquear, debían de tener un carácter fuerte para la vida militar.

A partir de los 12 años un espartano podía conseguir pareja al igual que las mujeres. Cuando un hombre sentía que no era más fuerte que sus semejantes acudía a la práctica sexual de la eugenesia, que consistía en que un buen esposo debía buscar un hombre, físicamente mejor que él, para que tuviera hijos con su esposa y así mejorar la descendencia.

Los niños eran separados de sus familias al cumplir los 7 años para entrenarlos en las practicas militares, a los niños se les obligaba a pasar hambre para que despertaran la astucia ya que debían robar para comer pero no podían ser descubiertos ya que serían seriamente castigados y en esto licurgo era claro: un espartano no se le castiga por el delito de robar, sino por el hecho de ser descubierto, puesto que, si no es capaz de robarle dos panes a un campesino, cómo podría entrar en un campamento enemigo.

Al momento de su graduación militar que era a los 21 años ya el espartano era considerado un ciudadano, pero debía pasar una última prueba que era matar a un ilota para demostrar su identidad, a los graduados más talentosos se enfrentaban entre si y los campeones formaban parte de la guardia real, de los 300 hombres.

En el aspecto más clave de licurgo era que un hombre debe dedicarse solo a la labor militar, los demás quehaceres debían dejárselos a los ilotas, ya que un espartano es el máximo ser humano y es tan digno que no necesita de otras actividades.

En resumen “un derecho primitivo, aislacionista (a los espartanos les estaba prohibido viajar al extranjero para que no adquiriesen los hábitos y malas influencias de otros pueblos), igualitario con pretensiones comunistas y profundamente militarista que se impuso durante ocho siglos en esa región del Peloponeso” (Gonzales, 1994).